En este episodio de “Behind the Scenes”, donde mostramos el trabajo de fotógrafos visionarios y les preguntamos sobre sus experiencias más allá de lo que ve el público, presentamos a Pablo Casals Aguirre, arquitecto, profesor, fotógrafo y cineasta con sede en Santiago, Chile. Aquí, comparte su metodología, que desarrolló con referencias al cine, y destaca sus intenciones de traducir las mejores obras arquitectónicas en imágenes, ya sea fijas o en movimiento.
ArchDaily - Victor Delaqua (VD): ¿Cómo definirías tu estilo?
Pablo Casals Aguirre (PC): Considero que como fotógrafo, más que un estilo, tengo una forma especial de mirar y observar lo que tengo frente a mi. A través de mi trabajo, intento pausar el tiempo mediante la luz, revelando lo que hay detrás de la imagen. Me apasiona y emociona poder contar historias a través de estas imágenes, ya sean en movimiento o fijas.
En el caso de las imágenes fijas, como lo es una fotografía, el tiempo de contemplación lo determina el espectador, mientras que en el caso de las imágenes en movimiento, el cine, ese tiempo lo defino yo como autor. Es interesante explorar este cruce constante que hago entre ambas disciplinas. Me hace estar atento cuando trato de descubrir nuevas formas de hacer y nuevas formas de contar mis historias.
VD: ¿Cuál es tu edificio favorito?
PC: Mi edificio favorito… uff clásica pregunta. De los que he visitado, el Monasterio Benedictino en Santiago de Chile. Y de los que aún no visité, las Termas de Vals de Peter Zumthor.
VD: ¿Las imágenes dicen una verdad o una mentira?
PC: Creo que las imágenes dicen la verdad del autor y no necesariamente la verdad de lo que existe en ese momento específico en que se hizo dicha imagen.
VD: ¿Editar es hacer trampa?
PC: ¡Para nada! La edición o la postproducción es vital, quizás no tanto en fotografía, pero en el cortometraje sí lo es, ya que hay varios fotogramas y no solo uno. Es necesario darle un orden, un ritmo al relato, buscar una narrativa que, en conjunto con el sonido, armen la pieza final y que esta pueda moverse y, sobre todo, poder decir algo sobre un tema específico.
Ahora, si me detengo un poco más a pensar sobre la pregunta, también podría decir que si hay mucha manipulación en la fotografía, es porque no es lo mismo mostrar un espacio interior con un lente de 17mm que con uno de 24mm o 35mm. Cuando hay un cliente o un encargo, el cliente pide y exige cosas que no son del todo éticas, como usar una lente específica para hacer que el espacio parezca más grande de lo que es o borrar y alterar cosas que no fueron resueltas en el proceso de diseño. Muchas veces somos nosotros, los fotógrafos, los que arreglamos esos detalles. Por nuestra parte, no estamos de acuerdo con esta práctica; de hecho, o intentamos evitarla o directamente no la hacemos. No somos expertos en aplicaciones o software, por lo que intentamos ser lo más puros posible mientras filmamos y configuramos la cámara en el lugar, y evitamos pasar demasiado tiempo en el estudio. Es mejor pasar más tiempo en el campo que adentro trabajando en una computadora.
VD: ¿Recuerdas tu primer disparo? ¿Qué era?
PC: ¡Mi primer disparo! Wow… El primero fue durante mi infancia. Crecí entre cámaras, con mi padre que era ingeniero y que registraba todas sus obras en películas y fotografías. Desde ahí comenzó la experimentación y la obsesión por la observación y la paciencia, esperando el momento perfecto. Mi primer disparo cuando era mayor, cuando trabajaba desde el inconsciente, fue en la Casa Curutchet de Le Corbusier en La Plata, Argentina. Ese fue el primer proyecto que fotografié y filmé, sin saber que sería el primero de muchos. Lo más lindo es que lo hice sin ninguna expectativa, solo porque lo sentí en ese momento. Cuando el fotógrafo y la obra se fusionan, aparece el alma del proyecto, revelando lo que otros no ven.
VD: ¿Cuáles son los elementos clave para una gran toma arquitectónica?
PC: Siempre se debe documentar una pieza y no considerarla como una posibilidad. Lo primero es conocer y comprender el territorio o lugar donde está ubicada: la trayectoria del sol, la época del año en la que tendrá lugar la sesión, etc. Por otro lado, si se trata de un trabajo por encargo, es importante saber cuál es ese encargo y saber cómo responder a él. Desde mi experiencia particular, siempre he creído que soy más que un fotógrafo, que soy un intérprete o un mediador.
Sin embargo, cuando no es un encargo, tengo un enfoque diferente para trabajar. Para hacer una buena imagen arquitectónica, es bastante innecesario contar con equipos de alta gama o la mejor tecnología. Lo que se necesita es práctica y saber que la mirada se construye cada día y en cada momento. Aunque no podemos negar que con una buena cámara se puede sacar una foto con mejor resolución e imprimirla en formatos más grandes, pero hoy en día, los smartphones permiten a todos experimentar con ser fotógrafos y hacer bellas imágenes. Hoy, el problema no es ese, es qué hacer con ella.
VD: ¿Qué error debe evitar una persona que se está iniciando en la fotografía?
PC: ¡Un fotógrafo que recién comienza debe saber que siempre cometerá errores! Incluso cuando eres un profesional con años de experiencia en el campo. De eso se trata todo, prueba y error, prueba y error. En el proceso, suceden la magia y el aprendizaje. Salir a la calle con tu cámara para sacar fotos sin miedo, sin restricciones, sin limitaciones - siempre experimentando, componiendo, probando diferentes técnicas. Si pudiera dar un consejo, creo que la clave es amar lo que haces, y ser constante, tener la determinación para lograr tus metas. No escuches demasiado a los demás y sigue tu propia intuición.
VD: ¿Quién o qué te influenció?
PC: Mis influencias provienen más del cine que de la fotografía. Hitchcock, Kubrik, Wenders, Herzog & Anderson, por nombrar algunos. Respecto a la fotografía, mi maestro es sin duda Sergio Larrain. También podría mencionar Poirot y otros como Gursky and Shulman.
VD: Un sueño que aún no se ha hecho realidad en fotografía.
PC: ¡Ojalá el sol dure más durante el amanecer y la hora dorada! Siempre ando corriendo y por lo general nunca logro cubrir los mejores ángulos del proyecto durante esos horarios. El sol se mueve más rápido de lo que uno cree.
VD: ¿Cómo es el proceso de trabajo con arquitectos?
PC: El proceso con arquitectos es muy divertido y exigente al mismo tiempo. Ellos suelen llamarte y pedirte que saques foto de cierta obra. Yo les pido planos y fotos preliminares para tener un idea, además de la ubicación donde se encuentra la obra. Luego elaboramos una propuesta de acuerdo con los requisitos, aportaciones y tiempos específicos del cliente. La sesión, o sesiones, y su duración depende de la ubicación geográfica. Por lo general, las locaciones remotas llevan más tiempo que las más cercanas, especialmente cuando hay más cambios en el clima. Una vez realizada la sesión de fotos, pasamos a la postproducción, donde se preseleccionan las imágenes finales y se clasifican con códigos en un PHOTOKIT, y se entregan al cliente para que seleccione una cantidad de fotos a base de lo que inicialmente acordamos. Pasada esa etapa, realizamos un seguimiento con el cliente o la arquitecta/-o sobre la difusión del proyecto en diferentes medios, ya sean impresos o digitales.
Conozca más sobre el trabajo de Pablo Casals Aguirre aquí y en @pablocasalsaguirre_works.